La artrosis de cadera o coxartrosis es la patología articular más frecuente y una de las causas principales de discapacidad en nuestro país.
La artrosis está relacionada con la edad. Afecta sobre todo a personas mayores de 50 años y a menudo a personas con antecedentes familiares.
Además, la artrosis puede estar causada por anomalías en el proceso de crecimiento o por una fractura de cadera.
El cartílago que cubre la articulación de la cadera se desgasta y los huesos rozan uno con otro, provocando dolor y rigidez.
Es importante saber que la artrosis no causa dolor ‘en la zona de la cadera’, sino en la ingle.
En ocasiones, baja hasta por la cara anterior del muslo e incluso puede llegar a doler la rodilla, lo que puede hacer pensar al paciente que tiene un problema de rodilla.
Al principio, el dolor aparece al caminar y al subir y bajar escaleras. Con el tiempo se siente también en reposo. De forma progresiva, aparecen dificultades para realizar acciones sencillas como cruzar las piernas estando sentado, calzarse o ponerse unos calcetines. Puede llegar a aparecer cojera al caminar.
La artrosis se diagnostica mediante radiografía, que muestra el desgaste de la articulación.
Cuando las medidas conservadoras, fisioterapia y farmacología no consiguen atenuar el dolor y la patología compromete de forma seria la calidad de vida de la persona, recomendaremos la sustitución de la articulación dañada por una prótesis de cadera.
Se trata de un procedimiento muy estandarizado y con el que conseguimos excelentes resultados. La desaparición del dolor es inmediata y la recuperación muy rápida. Personas muy incapacitadas vuelven a andar y a hacer vida normal en muy poco tiempo.
Durante la intervención removemos el hueso y cartílago dañados, y los reemplazamos por componentes protésicos.
La intervención se realiza con anestesia general o raquianestesia (de espalda para abajo).
SI el dolor lo permite, el paciente se sienta al día siguiente. En los 3 a 7 días posteriores, pasea con dos muletas y, si no hay complicaciones, recibe el alta. Los puntos se retiran a partir del 10º día.
Es una intervención muy agradecida. Normalmente no se necesita rehabilitación, el paciente va cogiendo fuerza y movilidad con mucha rapidez, y recupera la vida normal en un corto periodo de tiempo.
No obstante, tener una prótesis de cadera obliga a una cierta precaución de movimientos. Infórmate sobre estas limitaciones en el siguiente enlace